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Tarta de queso con frutos rojos
Queso crema: 375 gr
Huevos: 250 gr
Harina de maíz: 35 gr
Azúcar blanco: 175 gr
Leche: 300 gr
Nata: 300 gr
Galletas: 200 gr
Mantequilla: 90 gr
Mermelada de frutos rojos: cantidad necesaria
Azúcar glas: cantidad necesaria
Descubre nuestra receta para hacer en casa una deliciosa tarta de queso con frutos rojos: ¡un postre perfecto para la primavera!
La tarta de queso es un clásico postre, que puede prepararse de diferentes maneras, ya que admite variaciones, tanto para la cobertura como para la base. Hay tartas de queso que se preparan con una cobertura de mermelada o con una reducción de fresas, o de cualquier otra fruta roja de vuestro gusto. También se puede hacer sobre una base de galletas o incluso de chocolate blanco. Todas las opciones son riquísimas, y mantienen la esencia de esta típica tarta, que se caracteriza por su suave y liviana textura.
Preparación
Para preparar esta sabrosa tarta, lo primero que hay que hacer es derretir la mantequilla por apenas un minuto. Si tenéis microondas, podéis utilizarlo para acelerar el proceso. Mientras la mantequilla se va derritiendo, triturar las galletas hasta que queden bien deshechas, y luego integrarlas con la mantequilla ya líquida.
En un molde para horno, idealmente redondo, colocar la mezcla de galletas con mantequilla, de manera tal que quede bien compacta y cubra toda la base del molde. Llevar a la nevera por unos minutos, para que la mezcla se endurezca un poco.
Colocar en un cuenco o bowl el queso crema, los huevos, la harina de maíz, el azúcar, la leche y la nata, e integrar todos los ingredientes hasta conseguir una mezcla homogénea.
Precalentar el horno a 180ºC, y mientras va tomando temperatura, retirar el molde de la nevera y agregar sobre la base de galletas la preparación líquida.
Llevar al horno y cocinar durante una hora aproximadamente, a unos 160ºC
Cuando haya pasado el tiempo indicado, retirar del horno y dejar reposar la tarta hasta que tome temperatura ambiente. Cuando la tarta ya tenga la temperatura adecuada, cubrirla con mermelada de frutos rojos, y llevarla nuevamente a la nevera para que se enfríe bien y tome la consistencia adecuada.
Luego de una hora aproximadamente, retirar la tarta de la nevera, que ya estará lista para probar. Si lo deseáis también podéis echar por encima de la cobertura un poco de azúcar glas, y darle ese toque dulce final antes de servir.
