Hay casi 100 variedades diferentes de pepinos. Algunas se encuentran habitualmente en el supermercado o en los mercados de productores, como los pepinos ingleses, persas y Kirby, mientras que otras son más raras, como los pepinos blancos. Algunos son fáciles de digerir y no dan gases, mientras que otros resultan más apetecibles convertidos en encurtidos. Pero lo que todos los pepinos tienen en común es que son un aperitivo fresco y refrescante bajo en calorías que merece la pena explorar en la cocina.
Desde ensaladas frescas y sopas frías hasta platos de pollo, sándwiches y salsas, los pepinos son unas verduras muy versátiles. No sólo te mantendrán hidratado en verano, sino que también reforzarán tu sistema inmune al ser ricos en vitaminas A y C.
Con tantos pepinos para elegir, nos hemos centrado en ocho de las variedades más comunes, desde el familiar pepino inglés hasta el diminuto pepino Kirby, pasando por algunas sorpresas por el camino.
A continuación, te mostramos algunas de las variedades más comunes de pepino y cómo comerlas.
Tipos de pepino
Pepinos ingleses
Los pepinos ingleses, también conocidos como pepinos sin semillas, de invernadero, digestivos o europeos, son largos y delgados con una carne dulce y firme envuelta en una piel lisa y fina de color verde oscuro.
Muy crujientes y con unas semillas pequeñas y casi imperceptibles, son uno de los pepinos más versátiles de la cocina. Además, no hace falta pelarlos, ya que su piel no suele ser amarga.
Son perfectos para preparar sándwiches de pepino elegantes y atemporales y ensaladas frescas y aromáticas de pepino y eneldo o cortado en rodajas en un cóctel veraniego de Pimm's o flor de saúco.