Entre los beneficios de la stevia también cabe destacar su efecto cardiotónico (al regular los latidos del corazón gracias a su poder vasodilatador) e hipotensor, por su alto contenido en minerales como el potasio o el magnesio y porque actúa como un diurético suave, ayudando a bajar los niveles de ácido úrico.
La stevia, asimismo, ayudaría a combatir el estreñimiento por su alto contenido en fibra y favorecería la producción de los jugos gástricos, mejorando la digestión.
Esta planta medicinal, además, tendría un importante poder antioxidante, por lo que ayudaría a prevenir el envejecimiento.
Por su poder bactericida y cicatrizante se utiliza en productos para la higiene bucal (para prevenir la caries dental) y en productos contra las quemaduras y heridas.
Por su capacidad de disolver la dioxina, nicotina e histamina se le considera un poderoso antialérgico.
En último, actuaría como inmunomodulador, ayudando a fortalecer las defensas y mejorando, así, la resistencia frente a gripes y resfriados.
La stevia puede encontrarse en varias presentaciones: líquida, en hoja y en polvo. Sin embargo, es importante señalar que las propiedades medicionales que hemos mencionado solo se encuentran en la stevia en hojas o en polvo, ya que el extracto líquido carece de ellas.
Propiedades nutricionales de la stevia
La stevia está compuesta por hidratos de carbono (62%), proteínas (11%), fibra (16%), minerales como potasio, calcio, magnesio, zinc, fósforo y hierro, y las Vitaminas A y C.