Si bien no es para nada recomendable almacenar las patatas en la nevera, sí pueden ser guardadas en el congelador. Pero para ello, es necesario cortarlas y blanquearlas de manera previa, para prepararlas correctamente antes de congelarlas. Este secreto es muy bueno para que las patatas duren por mucho más tiempo, incluso hasta durante un año entero o más.
Lo primero que hay que hacer entonces es pelar las patatas, cortarlas en cubos de tamaño similar y remojarlas en agua fría, para lavarlas bien. Mientras tanto, se lleva a hervir una olla con agua, donde éstas se cocinarán o blanquearán por unos 3 a 5 minutos, dependiendo del tamaño.
Luego, con la ayuda de una espumadera, se retiran los trozos de patatas y se llevan inmediatamente a agua helada, para detener la cocción, y así evitar que se pongan blandas. Por último, antes de llevarlas al congelador, es importante escurrir bien las patatas y colocarlas en una bolsa plástica apta para congelador.
Cada vez que queráis comer patatas, simplemente tenéis que retirar, dejar que naturalmente se descongelen y simplemente cocinarlas. Un buen secreto es armar raciones de patatas en bolsas diferentes, para ya tenerlas preparadas a la hora de comer.
Volver a enterrar tus patatas al aire libre
Si vives en el campo o tenéis una casa con jardín, podríamos decir que este método es el mejor y el más natural para almacenar correctamente las patatas. Se trata simplemente de enterrarlas inmediatamente después de la cosecha o de la compra.
Hay que simplemente cavar algunas zanjas y colocar allí las patatas, cubriéndolas con tierra suelta, un poco de paja y algunos pliegues de períodico. Creáis o no, esto ayudará a que las patatas se mantengan frescas y duren hasta un año o más.
Solución a problemas con patatas almacenadas