El chai latte es una bebida a base de té, especiada, aromática y, actualmente, una de las más solicitadas en las cafeterías de todo el mundo. Seguramente, estarás preguntándote por qué el chai latte es hoy tan popular: pues el chai ha sabido adaptarse a lo largo del tiempo gracias a sus múltiples beneficios para la salud, y a sus innumerables variedades y maneras de degustarlo. Sin embargo, a pesar del hecho de que se sirve en tiendas de café y debe su nombre al café latte, en realidad no contiene ningún tipo de café.
¿Qué es el chai?
“Chai” significa en hindi “té” y su nombre original es “masala chai”. Es una de las bebidas a base de té más antiguas. Se originó en la India hace miles de años, y se ha extendido por todo el mundo en los últimos dos siglos.
El chai es una bebida que se prepara con té negro, especias y hierbas aromáticas, y por su peculiar sabor, puede servirse tanto en frío como en caliente.
Aquí te enseñaremos a hacer el mejor chai, y claro, podrás adaptarlo a tu gusto y compartir una de las bebidas del momento con tu familia y amigos.
Cómo hacer té chai latte: elaboración paso a paso
Preparar un buen chai latte es tarea simple, y si eres amante de las infusiones, disfrutarás hacerlo cada día. Puedes adaptar la receta y hacerla a tu propio gusto. La mezcla de especias que hemos usado para preparar este té funciona genial, tanto por los tipos seleccionados como por sus cantidades, pero si hay alguna que no te gusta, prescinde de ella o usa menos. Puedes finalizar el chai latte con leche de vaca, coco, soja, almendras o simplemente con agua.
SIRVE PARA: 4 tazas
Tiempo total: 0 HR 17 MIN
Ingredientes
- Agua 600 ml
- Canela 1 ramita
- Clavos de olor 10 unidades
- Jengibre 1 cucharadita en polvo o 2 cm
- Cardamomo 8 unidades o 1 cucharadita
- Nuez moscada 1 cucharadita
- Té negro 5 bolsas
- Miel (o equivalente para endulzar) 3 cucharaditas
- Leche a gusto
Preparación
- En una cacerola u olla amplia, calentar todas las especias a fuego medio durante dos o tres minutos. Con ello conseguimos potenciar el sabor y el aroma de las mismas.
- Pelar y trocear el jengibre fresco.
- Añadir el agua y el jengibre (ya pelado y troceado) y llevar a ebullición.
- Antes que rompa el hervor, bajar el fuego a mínimo o apagar y agregar las bolsitas de té negro (tipo English breakfast o Earl grey). Una vez realizado, dejar infusionar durante diez minutos con la cacerola u olla tapada.
- Transcurridos los 10 minutos, colar el té y desechar las especias. Repartir el té en cuatro tazas, llenando solo 3/4 partes de su capacidad.
- Completar el tercio restante con leche caliente, y servir inmediatamente.
Trucos para un chai perfecto
Como habéis visto, hacer chai latte no es nada difícil, básicamente consiste en cocer y colar las especias. Sin embargo, para lograr hacer un chai perfecto debes seguir algunos trucos y tips que aquí presentamos
Si usas especias enteras, rómpelas un poco, así conseguirás que desprendan más aroma. También puedes utilizar las especias en polvo, aunque no serán tan aromáticas como las enteras.
Añade el té al final. Si echas el té cuando aún estás cocinando, quedará demasiado amargo. Esto tapará el aroma de las especias. Tampoco debes dejar el té reposando por mucho tiempo. Al igual que con cualquier otro té, luego de un tiempo empieza a soltar un amargor que tapa su parte aromática. Y si lo que quieres es un sabor intenso del té, en lugar de dejar más tiempo reposando, debes agregar más té a tu mezcla.
Para el chai, se necesita aproximadamente una bolsita de té por vaso y una bolsita más. Es decir, si haces para 4 vasos, utiliza 5 bolsitas de té. Vale aclarar que 5 bolsitas equivalen a unas 3-4 cucharaditas de hojas de té a granel. Esta misma regla se aplica si quieres hacerlo con café de malta: no debes dejarlo reposando más de 2 o 3 minutos ya que si no se perderá el sabor de las especias utilizadas.
Variaciones y alternativas
Como te hemos comentado al inicio, no hay una sola receta para hacer chai latte, cada uno puede elegir las especias y combinaciones que más le guste. En general, la mezcla de especias para chai debe contener canela, vainilla, clavo de olor, jengibre y cardamomo. También es usual que lleve nuez moscada, anís estrellado y pimienta.
Además de su típica preparación con té negro, puedes hacerlo con té verde, café o solo con agua. A su vez, puedes complementar este delicioso té con leche de vaca, coco, soja, almendras, o cualquier otra que te apetezca.
¡A que te han dado ganas de prepararte un chai latte! Te invitamos a que lo intentes en casa y descubras los sabores y beneficios de esta bebida, y por qué no, hagas tu propia versión.
